domingo, 15 de noviembre de 2015

Punto y final.

Estoy en un punto muerto.
Estoy en el 'si, pero no' de esta vida
que llevo como cruz y no de cara.

Vivo con la sensación de estar solo, con gente,
de estar solo viviendo sensaciones de mierda.

Es jodido ver la cara de quien quieres,
y sentir que no viene para quedarse.
Aquí quien permanece, lo que tengo,
lo que siento, lo que me pudre por dentro,
son mis demonios; si alguien me quiere,
tendrá que compartirme con ellos,
pero a nadie le gustan los demonios.

Sobrevivo entre rachas efímeras de felicidad
y noches sin dormir.
Estoy empezando a pensar que esto de escribir,
de sentir, está llegando a su fin.