No te cambiaría por nadie
aunque nuestro mundo se destruya,
aunque estés lejos,
aunque estemos mal y nada funcione,
siempre serás tú.
Te vi, te sentí, te abracé
y volví a nacer,
escuché tu voz
y todo
empezó a tener sentido,
todo, absolutamente todo
en ti, fue vida.
Ven,
abrázame fuerte
y dime que nunca te irás,
que seguirás
luchando conmigo
cada día.
Que no hay distancia, miedo, guerra que nos aleje.